Causas, síntomas y diagnóstico de la taquipnea

La taquipnea se define como una frecuencia respiratoria elevada o, más simplemente, una respiración más rápida de lo normal. Una frecuencia respiratoria normal puede variar según la edad y la actividad, pero generalmente está entre 12 y 20 respiraciones por minuto para un adulto en reposo.

Por el contrario, el término hiperpnea se refiere a la respiración rápida y profunda, mientras que la taquipnea se refiere a la respiración rápida y superficial. Veamos las posibles causas de la taquipnea, así como las condiciones médicas en las que puede ocurrir.

Síntomas

La taquipnea puede ir acompañada de una sensación de dificultad para respirar e incapacidad para obtener suficiente aire (disnea), dedos y labios teñidos de azul (cianosis) y succión de los músculos del pecho con la respiración (retracción).

La taquipnea también puede ocurrir sin ningún síntoma obvio, especialmente cuando está relacionada con afecciones como desequilibrios metabólicos o afecciones del sistema nervioso central.

Taquipnea frente a disnea

Como se señaló, la taquipnea es un término que se usa para describir una frecuencia respiratoria rápida y superficial, pero no dice nada sobre lo que siente una persona. Con la taquipnea, una persona puede tener mucha falta de aire o, por el contrario, puede no notar ninguna dificultad para respirar.

La disnea se refiere a lasensaciónde dificultad para respirar.

La disnea puede ocurrir con una frecuencia respiratoria normal, una frecuencia respiratoria alta o una frecuencia respiratoria baja. También puede ocurrir tanto con un patrón de respiración superficial como con un patrón de respiración profunda.

Causas

Existen tanto causas fisiológicas de taquipnea como causas patológicas.

Causas fisiológicas

Las causas fisiológicas de una afección se refieren a la respuesta normal del cuerpo para corregir otra afección. En este caso, la condición, como la taquipnea, no es una respuesta corporal anormal, sino una respuesta normal a otro tipo de condición anormal o desequilibrio en el cuerpo.

La taquipnea puede ser causada por tres procesos fisiológicos primarios:

• Un desequilibrio entre los gases respiratorios: un nivel bajo de oxígeno en la sangre (hipoxemia) o un nivel elevado de dióxido de carbono en la sangre (hipercapnia) pueden causar taquipnea.
• Un desequilibrio ácido-base: la taquipnea puede ser causada por un exceso de ácido en el cuerpo o una disminución en una base en el cuerpo (una interrupción en el equilibrio ácido-base del cuerpo). Cuando el cuerpo siente que la sangre está demasiado ácido (acidosis metabólica), expulsa el dióxido de carbono del pulmón en un intento de eliminar el ácido del cuerpo.
• Fiebre: con fiebre, la taquipnea es compensatoria, lo que significa que la respiración se vuelve más rápida para eliminar el calor del cuerpo.

En estos ejemplos, la taquipnea no es anormal, sino más bien una forma en que el cuerpo compensa otra anormalidad en el cuerpo para mantener el equilibrio (homeostasis).

Causas patológicas

A diferencia de las causas fisiológicas, una causa patológica es aquella que no ocurre en un esfuerzo por restablecer el equilibrio en el cuerpo y, en realidad, hace lo contrario.

Por ejemplo, la hiperventilación puede provocar una respiración rápida y superficial que no se produce como un esfuerzo por restablecer el equilibrio en el cuerpo, sino que puede ser una reacción a la ansiedad o al miedo.

Condiciones que pueden resultar en taquipnea

Una amplia gama de afecciones médicas pueden provocar taquipnea. Por categorías, estos pueden incluir:

• Relacionados con los pulmones: las enfermedades pulmonares pueden reducir los niveles de oxígeno o aumentar los niveles de dióxido de carbono, y la respiración rápida intenta restaurarlos a la normalidad. Estos incluyen enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), asma, neumonía, fibrosis pulmonar, neumotórax (pulmón colapsado), embolia pulmonar y más.
• Relacionados con el corazón: afecciones como insuficiencia cardíaca, anemia o tiroides baja pueden provocar cambios cardiovasculares que a su vez causan taquipnea.
• Hiperventilación: esto puede ocurrir debido a dolor, ansiedad u otras afecciones.
• Acidosis metabólica: cuando el nivel de ácido en la sangre es demasiado alto, la frecuencia respiratoria aumenta para eliminar el dióxido de carbono. Algunas causas de esto incluyen cetoacidosis diabética, acidosis láctica y encefalopatía hepática.
• Relacionados con el sistema nervioso central: la taquipnea puede ser causada directamente por anomalías cerebrales, como tumores cerebrales.
• Medicamentos: los medicamentos como la aspirina, los estimulantes y la marihuana pueden provocar una frecuencia respiratoria rápida y superficial.

En las personas hospitalizadas, la taquipnea puede ser una señal de que se está desarrollando una neumonía y, a menudo, ocurre antes de que aparezcan otros signos evidentes de neumonía.

Taquipnea y cáncer de pulmón

El cáncer de pulmón puede causar taquipnea de diferentes formas. El daño a los pulmones puede interrumpir el intercambio normal de oxígeno y dióxido de carbono. La cicatrización en el pecho, como ocurre con la cirugía de cáncer de pulmón, puede resultar en una disminución de la capacidad para respirar y tomar oxígeno.

La anemia inducida por quimioterapia puede empeorar aún más la taquipnea, ya que hay menos glóbulos rojos para transportar oxígeno y, por lo tanto, la respiración se vuelve más rápida en un intento por corregir esto.

Diagnóstico

El diagnóstico de taquipnea variará según la edad de la persona, otros problemas médicos, los medicamentos actuales y otros síntomas, pero puede incluir:

• Oximetría: Es posible que le coloquen un "clip" en el dedo para calcular la cantidad de oxígeno en la sangre.
• Gases en sangre arterial (ABG): los gases en sangre miden el nivel de oxígeno, el contenido de dióxido de carbono y el pH de la sangre. El pH puede ser útil para evaluar anomalías metabólicas. Si el pH es bajo (acidosis), se pueden realizar pruebas para buscar causas como cetoacidosis diabética, acidosis láctica y problemas hepáticos.
• Radiografía de tórax: una radiografía de tórax puede determinar rápidamente algunas causas de taquipnea, como un pulmón colapsado.
• Tomografía computarizada de tórax (TC): se puede realizar una TC de tórax para buscar enfermedades o tumores pulmonares.
• Pruebas de función pulmonar: las pruebas de función pulmonar son muy útiles cuando se buscan afecciones como la EPOC y el asma.
• Glucosa: a menudo se realiza un análisis de azúcar en sangre para descartar (o confirmar) la cetoacidosis diabética.
• Electrolitos: los niveles de sodio y potasio son útiles para evaluar algunas de las causas de la taquipnea.
• Hemoglobina: Se puede realizar un hemograma completo y hemoglobina para buscar evidencia de anemia e infecciones.
• Electrocardiograma (EKG): un EKG puede buscar evidencia de un ataque cardíaco o ritmos cardíacos anormales.
• Exploración de VQ: a menudo se realiza una exploración de VQ si existe la posibilidad de una embolia pulmonar.
• Imágenes por resonancia magnética (IRM) del cerebro: si no se encuentran causas obvias de taquipnea, una resonancia magnética del cerebro puede ser útil para descartar anomalías cerebrales (como tumores) como causa.
• Examen de toxicología: hay muchos medicamentos, tanto recetados como de venta libre e ilegales, que pueden causar taquipnea. A menudo, se realiza una prueba de toxicología en situaciones de emergencia si se desconoce la causa de la taquipnea.

Tratamiento

El tratamiento de la taquipnea depende principalmente de determinar y corregir la causa subyacente.