La pericondritis es una infección del pericondrio, que es el tejido que rodea y nutre el cartílago que forma la parte externa de la oreja. Es similar a la condritis, que es una infección del cartílago de la oreja. Sin un tratamiento adecuado y oportuno, la pericondritis puede provocar un cambio cosmético permanente.
IAN HOOTON / BIBLIOTECA DE FOTOS DE CIENCIA / Getty ImagesLas causas comunes generalmente involucran un trauma en el tejido e incluyen:
- Perforación de la oreja, especialmente en lo alto de la porción del cartílago de la oreja
- Trauma quirúrgico
- Lesión deportiva u otro traumatismo contundente
- Picaduras de insectos
- Quemaduras
- Cortes o laceraciones de cualquier tipo en la oreja.
- Otitis externa mal tratada (oído de nadador)
- Enfermedad autoinmune, como granulomatosis con poliangeítis y policondritis recidivante
Diagnóstico
El diagnóstico de pericondritis es sencillo y se basa en la historia de traumatismo en el oído y la apariencia del área infectada. En sus etapas iniciales, la pericondritis se parece a la celulitis. Su médico tomará un historial completo para identificar los factores de riesgo enumerados anteriormente y examinará su oído. Aunque probablemente le duela un poco, es probable que su médico le apriete la oreja para ver si hay algún "ceder" o fluctuación, ya que esto puede indicar un absceso o condritis. Si ha tenido varios casos de pericondritis, su médico lo derivará a un reumatólogo para determinar si tiene una enfermedad autoinmune.
Síntomas
Dado que perforar el cartílago del oído externo es una práctica muy común, parece ser la causa más común de pericondritis en este momento. La pericondritis es causada por la bacteria.Staphylococcus aureus.
La pericondritis puede manifestarse por los siguientes síntomas comunes:
- Enrojecimiento
- Hinchazón
- Dolor
- Pus u otra secreción de líquido (en casos graves)
- Fiebre (en casos graves)
- Deformación de la estructura de la oreja (en casos graves)
Si experimenta pericondritis recidivante, puede experimentar otros síntomas menos comunes, que incluyen:
- Oreja flácida
- Pérdida de audición repentina
- Vértigo
- Equilibrio deteriorado
- Tinnitus
- Drenaje del oído
- Infecciones del oído medio
Tratamiento
El tratamiento de su pericondritis se basará en su examen físico. Si su médico sospecha un absceso, se hará una pequeña incisión para drenar el pus. Luego, su médico empacará el área que fue drenada con gasa o cinta recubierta de antibiótico. Si se usa un empaque, su médico programará una cita de seguimiento para retirar el empaque. Con el tiempo, la oreja se curará por sí sola sin suturas.
Independientemente de la presencia de pus, su médico le recetará antibióticos. Augmentin o Keflex son antibióticos comunes recetados para tratar la pericondritis. Dependiendo de la gravedad de la infección, se prescriben antibióticos para que se tomen por vía oral o por vía intravenosa.
La pericondritis autoinmune se trata con medicamentos esteroides como prednisona para reprimir la respuesta inmune y evitar que ataque el cartílago de la oreja (y otras partes del cuerpo). Después de comenzar el tratamiento, su médico también lo derivará a un reumatólogo para seguimiento adicional en relación con su enfermedad autoinmune.
Prevención de la pericondritis
A veces, la pericondritis no se puede prevenir, como en el caso de una lesión accidental. Sin embargo, perforar el cartílago de la oreja, especialmente en la parte superior de la oreja, aumenta significativamente el riesgo de desarrollar pericondritis. También puede aumentar su riesgo de desarrollar pericondritis si tiene varias perforaciones en las proximidades de la parte superior del oído. Si mantiene sus perforaciones en el lóbulo de la oreja, puede reducir en gran medida el riesgo de tener complicaciones relacionadas con las perforaciones en las orejas. El pronóstico de la pericondritis es bueno si se trata con prontitud; Por lo general, se espera una recuperación completa.