El trabajo en el jardín y la jardinería implican agacharse, levantar objetos, cavar, arrodillarse, exponerse a los elementos, alérgenos y más. Incluso el más cordial de nosotros con fibromialgia, síndrome de fatiga crónica u otras enfermedades crónicas es probable que se canse del agotamiento en poco tiempo.
¿Pero eso significa que tienes que dejar que tu jardín se convierta en semillas? Quizás no, si puede hacer los ajustes correctos. Es posible que no pueda hacer todo lo que podía antes de enfermarse, pero es posible que pueda disfrutar de este pasatiempo y hacer que las cosas se vean bien.
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Las herramientas adecuadas
Las herramientas adecuadas pueden marcar la diferencia entre crear belleza y tirar la paleta, por así decirlo. Algunos elementos esenciales para cualquier jardinero con estas condiciones son:
- Herramientas manuales buenas y resistentes. Los endebles no son lo suficientemente fuertes para compensar la falta de fuerza que tengas. Los más duros harán mucho más trabajo pesado por ti.
- Una almohadilla gruesa para arrodillarse. Ya sea que esté arrodillado o sentado, tener una buena almohadilla lo mantendrá mucho más cómodo y podría ayudarlo a permanecer donde necesita estar un poco más.
- Un carrito de jardín que puedes llevar por el patio. Busque algo que contenga todas sus herramientas junto con el espacio que queda para las plantas. Muchos de ellos también tienen portavasos, lo que significa que no dejará su bebida en la mitad del patio. Un buen carrito le ahorrará muchos viajes para que pueda ahorrar energía para el trabajo real.
- Guantes gruesos. Primero, protegerán sus manos de raspaduras y raspaduras, que pueden tardar en sanar y pueden introducir una infección que puede estresar su sistema inmunológico sobrecargado. En segundo lugar, pueden evitar que su piel entre en contacto con alérgenos o sustancias químicas que pueden exacerbar sus síntomas.
- Una visera para el sol. Muchos de nosotros tenemos sensibilidad a la luz y podemos beneficiarnos de una visera ya sea que usemos gafas de sol o no. Si nunca ha usado una, se sorprenderá de lo mucho que ayudan. Además, para aquellos de nosotros que tendemos a sudar excesivamente, la visera puede evitar que el sudor corra hacia los ojos. ¿Por qué no una gorra de béisbol, preguntas? Porque una visera es considerablemente más fresca en un día caluroso, lo que significa que será mejor para controlar la sensibilidad a la temperatura.
Manejo de sus síntomas
El autocontrol es una gran clave cuando se trata de trabajo en el jardín y jardinería, o cualquier trabajo agotador. Escuche a su cuerpo. Sea realista acerca de si puede o no manejar la jardinería en un día determinado y, de ser así, cuánto puede hacer sin exacerbar sus síntomas.
Piense en qué medicamento tomaría para los dolores y molestias posteriores a la jardinería y considere si tomarlos de manera preventiva podría ser mejor que esperar hasta que realmente le duela. Sin embargo, asegúrese de no tomar algo que pueda obstaculizar su destreza. No querrás ser torpe al manipular herramientas afiladas.
Si tiene sensibilidad a la temperatura, querrá planificar su jardinería para momentos en los que no haga demasiado calor o demasiado frío para trabajar cómodamente. Durante los meses más calurosos, las mañanas y las noches pueden ser las mejores. Intente aprovechar el movimiento del sol trabajando en áreas sombreadas. La estrategia opuesta puede ayudarlo a mantenerse caliente durante las épocas más frescas.
Suena obvio decir "mantente hidratado", pero vale la pena decirlo sin importar cuántas veces lo hayas escuchado antes. Las consecuencias de la deshidratación y la insolación pueden ser graves, y si su cuerpo tiene problemas para enfriarse, es posible que corra un mayor riesgo.
Recuerde tener a mano los suministros médicos de emergencia que pueda necesitar, como un inhalador para el asma o EpiPen. También es una buena idea llevar su teléfono celular con usted en caso de que necesite ayuda.
Y, por supuesto, protector solar. ¿Quemadura de sol además de nuestros tipos únicos de dolor de hiperalgesia y alodinia? ¡No, gracias!
Estimulación, estimulación, estimulación
Aprender a mantener el ritmo adecuado puede ayudarlo a hacer mucho más con menos consecuencias, en el jardín y en casi todas las áreas de la vida.
A muchos de nosotros nos va mejor cuando trabajamos en ráfagas cortas con descansos intermedios. Pruebe diez minutos de trabajo seguidos de diez minutos de descanso y vea cómo se siente, luego ajuste hasta encontrar el equilibrio adecuado para usted.
Es posible que deba experimentar para encontrar el programa de ritmo que mejor se adapte a sus necesidades. Puede parecer que los descansos frecuentes harán que el trabajo tome más tiempo, pero es posible que descubra que en realidad le permite ser más productivo y prevenir los brotes de síntomas importantes.
Aquellos con síndrome de fatiga crónica deben ser especialmente cautelosos cuando se trata de trabajo físico debido a un síntoma llamado malestar post-esfuerzo.
El ritmo puede ser difícil de aprender. Tenemos una tendencia a trabajar hasta que nos estrellamos, en un esfuerzo por hacer las cosas mientras podamos.