Una lesión de Lisfranc es una lesión de los ligamentos que conectan los huesos del mediopié y el antepié. A veces, la lesión es una simple dislocación (lesión de ligamentos) y, a veces, se produce una fractura de hueso que crea una fractura / dislocación de Lisfranc. Una dislocación ocurre cuando hay una separación de la alineación articular normal entre el antepié y el mediopié. Cuando también hay una fractura, el hueso roto generalmente ocurre en los huesos del mediopié.
Terje Rakke / Getty ImagesEl pie se divide en tres partes principales. El área del antepié que consiste en los dedos de los pies; el mediopié formado por los huesos pequeños llamados navicular, cuneiforme y cuboides; y el retropié que consiste en el astrágalo (parte inferior del tobillo) y el calcáneo (talón). La articulación de Lisfranc se encuentra en la unión de los huesos del antepié y el mediopié.
Causas
La lesión de Lisfranc lleva el nombre del cirujano francés Jacques Lisfranc en el ejército de Napoleón. La herida original descrita por Lisfranc solía producirse cuando un soldado se caía de su caballo, pero su pie no se soltaba del estribo, o eso cuenta la historia. Hoy en día, la mayoría de las lesiones en la parte media del pie ocurren debido a un paso incómodo en superficies irregulares, lesiones deportivas o colisiones de vehículos motorizados.
Diagnóstico
Es importante tener una alta sospecha de lesión de Lisfranc siempre que haya dolor e hinchazón en la parte media del pie. Estas lesiones pueden ser difíciles de diagnosticar y, sin el tratamiento adecuado, a menudo se obtienen malos resultados. Cualquier paciente con síntomas de una lesión de Lisfranc debe ser evaluado por un médico.
Los síntomas comunes de una lesión de Lisfranc incluyen
- Dolor en la mitad del pie.
- Hinchazón y hematomas
- Dolor al caminar / estar de pie
Las lesiones de Lisfranc pueden ser bastante sutiles en la apariencia radiológica. Para aclarar mejor la lesión, a veces es necesario aplicar una fuerza al pie para enfatizar la alineación anormal. También es común realizar una vista de rayos X del pie normal y del pie anormal para definir mejor la lesión. Si existe alguna duda sobre la lesión, se pueden recomendar más pruebas que incluyan una tomografía computarizada o una resonancia magnética.
Desafortunadamente, muchas de estas lesiones no se notan sin obtener la prueba adecuada. Muchas lesiones de Lisfranc se diagnostican erróneamente como un esguince de pie.
Tratamiento
La mayoría de las veces, el tratamiento de una lesión de Lisfranc es quirúrgico, aunque algunas lesiones menores pueden tratarse de forma no quirúrgica. Si hay una separación mínima de los huesos, una alternativa adecuada es un yeso rígido para caminar aplicado durante aproximadamente ocho semanas. Sin embargo, el tratamiento más común es asegurar los huesos fracturados y dislocados con una fijación interna (tornillos) o externa (clavos).
La cirugía tiene como objetivo restaurar la alineación normal de las articulaciones y luego asegurar los huesos en la posición adecuada. La fijación más fuerte suele ser con múltiples tornillos metálicos, colocados a través de diferentes huesos para asegurar el mediopié al antepié en la alineación adecuada. La recuperación normal implica de 6 a 8 semanas sin peso en el pie. El pie generalmente está protegido con una bota para caminar durante varias semanas más, y los tornillos generalmente se quitan después de 4-6 meses. La recuperación completa suele llevar de 6 a 12 meses y, en caso de lesiones más graves, pueden producirse problemas permanentes en los pies.
La complicación más común de la lesión de Lisfranc es la artritis del pie. La artritis postraumática imita la artritis por desgaste, pero su curso se acelera debido a una lesión en el cartílago articular. La artritis puede provocar dolor crónico en la articulación lesionada. Si hay un dolor crónico como resultado de la artritis postraumática, puede ser necesario un procedimiento quirúrgico llamado fusión.
Otra posible complicación de una lesión de Lisfranc se llama síndrome compartimental. El síndrome compartimental ocurre cuando una lesión causa una inflamación severa en una parte contenida del cuerpo. Si la presión de la hinchazón aumenta lo suficiente dentro de un área restringida, el suministro de sangre a esa área puede verse limitado y puede provocar complicaciones graves.