Puede experimentar un sabor metálico durante la quimioterapia, especialmente al comer. Los cambios en el gusto pueden ser comunes mientras se somete a un tratamiento de quimioterapia. Este efecto secundario puede hacer que los alimentos y las bebidas tengan un sabor desagradable e incluso se vuelvan incomibles en ocasiones.
David Sutherland / Getty ImagesTenga la seguridad de que no es la única persona que experimenta esto, ¡aproximadamente la mitad de las personas que reciben quimioterapia lo experimentan! Algunos medicamentos de quimioterapia son más notorios que otros por causar este efecto secundario. La mostaza nitrogenada, la vincristina, el cisplatino y la ciclofosfamida son las que a menudo se enumeran.
Como hacer frente
Hay varias cosas que puede hacer para tratar de contrarrestar o enmascarar el sabor metálico que puede estar experimentando debido a la quimioterapia:
- Evite comer durante dos o tres horas después de recibir la quimioterapia.
- Beba bebidas ácidas como limonada o limada. Si bien esto puede ayudar con el sabor metálico, debe evitar estas bebidas si tiene llagas en la boca y pueden ser irritantes si experimenta sequedad en la boca.
- Use utensilios de plástico en lugar de metal. Mantenga el metal fuera de su boca. Es posible que desee comprar utensilios de plástico de alta calidad que se sientan mejor en la boca.
- Cocine con hierbas y especias fuertes que ayudarán a disimular el sabor metálico.
- Use salsas como teriyaki, barbacoa o ketchup. Estas salsas de alto sabor para carne y verduras pueden enmascarar los sabores desagradables.
- Mastique chicles con sabor a menta o caramelos duros. Esto puede ayudar entre comidas.
- Mastica hielo.
- Coma alimentos refrigerados o congelados, como batidos, helados y paletas heladas. Tener paletas heladas a mano entre comidas puede ser una buena táctica.
Las soluciones varían de persona a persona
Recuerda que no hay dos personas iguales. Algunas personas encuentran que una dieta más blanda disminuye el sabor metálico, mientras que otras necesitan muchas salsas y especias para enmascararlo.
Para algunos, la carne roja tiene un sabor muy metálico y otros la encuentran más fuerte en el pollo. Tienes que experimentar con la comida para descubrir qué funciona para ti. Lo que puede funcionar para una persona puede no funcionar para otra.
¿Es posible la prevención?
Desafortunadamente, su médico no puede hacer mucho para prevenir los cambios en el gusto causados por la quimioterapia. Aun así, es muy importante que informe a su médico sobre cualquier efecto secundario del tratamiento que esté experimentando, incluso este que es común e incluso esperado.
No intente vitaminas o suplementos adicionales que haya leído que pueden ayudar a menos que su médico se lo haya recomendado. Su equipo médico necesita saber todo lo que está tomando durante el tratamiento, incluidas las vitaminas y los remedios "naturales" para que puedan prevenir interacciones dañinas con su tratamiento.
Cuando experimente sabores desagradables, es posible que coma menos y desarrolle una aversión a ciertos alimentos o a comer por completo. Esto puede provocar pérdida de peso e incluso desnutrición. También puede llevar a evitar las comidas con familiares y amigos, que de otra manera son buenas para el apoyo social. Esto debilitará aún más su cuerpo y dificultará el tratamiento y la recuperación. Utilice las tácticas enumeradas para que pueda seguir comiendo una variedad de alimentos saludables mientras se somete al tratamiento.