Ray Kachatorian / Getty Images
La esquizofrenia es una afección de salud mental grave que se caracteriza por alucinaciones, delirios y habla desorganizada. Esta afección puede provocar una discapacidad significativa para algunas personas si no se trata. Las causas de la esquizofrenia son multifactoriales y se investigan activamente, pero las investigaciones existentes indican que existen factores de riesgo genéticos para la esquizofrenia.
Se ha descubierto que la heredabilidad de la esquizofrenia oscila entre el 60 y el 80%. Sin embargo, el hecho de que un familiar tenga esquizofrenia no significa que la desarrollará. Muchos factores ajenos a la genética causan la esquizofrenia, incluidos gen-gen, gen -medio ambiente y medio ambiente-medio ambiente.
La esquizofrenia afecta aproximadamente al 1% de las personas en todo el mundo y se están investigando sus causas.
Causas genéticas
La genética detrás de la esquizofrenia es compleja. La esquizofrenia se considera poligénica, lo que significa que no existe un solo gen que cause esta afección.
En cambio, los investigadores han encontrado muchos genes y loci diferentes que pueden aumentar las posibilidades de desarrollar esquizofrenia. Cada una de estas variantes de genes aumenta la predisposición a la esquizofrenia en una pequeña cantidad, y muchas variantes de genes en combinación aumentan aún más el riesgo.
Los estudios de asociación de todo el genoma han ayudado a conectar variantes genéticas específicas con la esquizofrenia. De estos, un metaanálisis de 2014 realizado por el Grupo de Trabajo de Esquizofrenia es el estudio genético más extenso. Este estudio encontró 108 loci genéticos que están asociados con la esquizofrenia.
De estos 108 loci, los genes tienen implicaciones para la regulación de los canales de calcio, la inmunidad, la síntesis de dopamina y los neurorreceptores de glutamato.
Es importante tener en cuenta que un locus es una región o ubicación genómica en un cromosoma donde se encuentra un gen. De los 108 loci asociados con la esquizofrenia, más de 600 genes están implicados. Los investigadores recomiendan precaución al sacar conclusiones sobre estos 600 genes.
Deleción 22q11.2
Las variaciones genéticas asociadas con la esquizofrenia incluyen duplicaciones, deleciones y microdeleciones. Una de las deleciones más estudiadas con una alta tasa de esquizofrenia es el síndrome de deleción 22q11.2. Se estima que alrededor del 22% de las personas con esta deleción tienen esquizofrenia.
Variante DRD2
Las investigaciones indican que el polimorfismo His313 en el gen DRD2 está relacionado con la esquizofrenia, gen que participa en la señalización del receptor de dopamina.
Variante ZNF804A
Se ha descrito como gen de riesgo de esquizofrenia ZNF804A, un gen de proteína con dedos de zinc que es más activo prenatalmente. El polimorfismo rs1344706 de este gen está asociado con la susceptibilidad a la esquizofrenia.
Aún quedan muchas investigaciones por hacer con respecto a la genética de la esquizofrenia. Actualmente, no sabemos si ciertas variantes genéticas se relacionan con ciertas características clínicas de la esquizofrenia. También solo podemos sacar conclusiones sobre genes que aumentan el riesgo de esquizofrenia; no se ha identificado una herencia mendeliana o una causa de un solo gen.
Posibilidad de desarrollar esquizofrenia
La esquizofrenia es altamente hereditaria y se estima que la enfermedad es hereditaria en un 60-80%.
La probabilidad de que una persona desarrolle esquizofrenia aumenta con la cercanía de la relación que tiene esquizofrenia. Por ejemplo, tener un padre con esquizofrenia aumenta el riesgo de una persona 10 veces el riesgo de la población del 1%. Aquellos cuyos padres tienen esquizofrenia tienen 40 veces más riesgo de desarrollarla que la población general.
Los estudios de gemelos son una herramienta importante en la forma en que los científicos investigan y llegan a conclusiones sobre el impacto de los genes y la herencia porque pueden examinar gemelos idénticos (que comparten el 100% del ADN) y gemelos fraternos (que comparten el 50% del ADN).
Un estudio de gemelos a nivel nacional de 2018 en Dinamarca encontró que la tasa o porcentaje de concordancia que ambos tenían esquizofrenia en gemelos idénticos era del 33%. Fue del 7% en gemelos fraternos. La heredabilidad de la esquizofrenia en este estudio se estimó en 79%.
Sin embargo, la tasa relativamente baja (33%) de concordancia en gemelos idénticos indica que otros factores además de la genética están en juego en el desarrollo de la esquizofrenia.
La mayor parte de la investigación sobre la genética de la esquizofrenia se ha realizado en participantes de ascendencia europea. Esto significa que la generalización de estos hallazgos en poblaciones globales es cuestionable.
Un estudio reciente de 2019 sobre más de 57,000 participantes de ascendencia de Asia oriental concluyó que los factores de riesgo genéticos son consistentes en todas las poblaciones, pero se necesita más investigación en poblaciones variables.
Factores genéticos vs.ambientales
Aunque la investigación ha encontrado un factor de riesgo genético significativo para la esquizofrenia, actualmente no es posible hacer predicciones basadas en la genética sobre quién desarrollará finalmente la esquizofrenia.
Los estudios de asociación de todo el genoma explican una minoría de casos de esquizofrenia. Muchos investigadores creen que la interacción gen-ambiente tiene un papel importante en el desarrollo de la esquizofrenia.
En otras palabras, una persona puede estar predispuesta a desarrollar esquizofrenia debido a sus genes, pero no necesariamente desarrollaría la condición sin el aporte adicional de los factores de riesgo ambientales.
Los factores ambientales que se ha demostrado que aumentan el riesgo de esquizofrenia incluyen:
- Complicaciones del embarazo y el parto
- Infecciones virales
- Edad parental avanzada
- Trauma
- Desventajas o adversidades sociales
- Aislamiento
- Migración
- Urbanidad
- Consumo de cannabis u otras sustancias
En última instancia, todavía hay mucha investigación por hacer sobre las causas de la esquizofrenia, incluidos los factores ambientales y genéticos. La genética de la esquizofrenia es un área de investigación activa y en curso, que incluye la investigación de terapias genéticas para ayudar a tratar esta grave afección de salud mental.