El activador tisular del plasminógeno, o tPA, es el único tratamiento aprobado por la FDA para el accidente cerebrovascular isquémico o trombótico, que es un accidente cerebrovascular causado por un coágulo de sangre que interrumpe el flujo sanguíneo a una región del cerebro.
Imágenes de Chris Ryan / GettyTambién se ha utilizado en el tratamiento de la embolia pulmonar y el infarto de miocardio. El TPA es un anticoagulante y, por lo tanto, no se usa para accidentes cerebrovasculares hemorrágicos o traumatismos craneoencefálicos.
Cómo funciona
El TPA es una proteína natural que se encuentra en las células endoteliales, las células que recubren los vasos sanguíneos. Activa la conversión del plasminógeno en plasmina, enzima responsable de la descomposición de los coágulos, ayudando a restablecer el flujo sanguíneo al cerebro Es un medicamento poderoso que debe ser administrado por un equipo médico experimentado.
Antes del tratamiento con tPA
Antes de recibir tratamiento con tPA, debe esperar realizarse una tomografía computarizada (TC) del cerebro, ya que existen varias afecciones médicas que hacen que sea demasiado peligroso para usted recibir tPA. Si tiene alguna de estas afecciones, el tPA no solo no lo ayudaría, sino que podría causar un daño significativo a su salud.
Las condiciones que lo harían inelegible para recibir tratamiento con tPA incluyen:
- Accidente cerebrovascular hemorrágico (sangrado en el cerebro)
- Aneurisma cerebral o AVM
- Procedimiento quirúrgico reciente
- Heridas en la cabeza
- Trastornos hemorrágicos o de la coagulación sanguínea.
- Úlceras sangrantes
- El embarazo
- Medicamentos anticoagulantes
- Trauma
- Presión arterial alta incontrolada
Administración de tPA
El tratamiento con tPA ha sido eficaz para las personas con un accidente cerebrovascular isquémico siempre que se reciba por vía intravenosa hasta en las 3 horas posteriores al inicio de los síntomas. Se considera el tratamiento endovascular para administrar tPA en el lugar del coágulo o la recuperación del coágulo hasta 24 horas después de un accidente cerebrovascular.
Las pautas para el tratamiento del accidente cerebrovascular agudo publicadas por la American Heart Association en 2018 recomiendan encarecidamente la altefase intravenosa (tPA) dentro de las 3 horas posteriores al inicio de los síntomas del accidente cerebrovascular para los pacientes elegibles. Se ha demostrado que este enfoque de tratamiento produce los mejores resultados generales.
Se han establecido protocolos para identificar rápidamente si podría estar sufriendo un derrame cerebral, de modo que sus pruebas y tratamiento puedan ser rápidos y eficientes, permitiéndole recibir tratamientos que salvan vidas de manera oportuna. De hecho, algunos centros están avanzando en el diagnóstico de accidentes cerebrovasculares antes que nunca a través de unidades móviles de accidentes cerebrovasculares.
Efectos secundarios
Si bien se ha demostrado que el tPA es beneficioso en el tratamiento del accidente cerebrovascular, existe un riesgo asociado con el tratamiento con tPA, incluso para las personas que han recibido autorización médica para el tPA. Es un potente anticoagulante y pueden producirse efectos secundarios graves, incluidos los siguientes:
- Hemorragia (sangrado) que afecta al cerebro: provoca dolores de cabeza, debilidad, confusión, pérdida del conocimiento, convulsiones.
- Hemorragia del sistema digestivo: provoca sangre en las heces o dolor de estómago.
- Pérdida de sangre severa: causa mareos, presión arterial baja, pérdida del conocimiento
- Sangrado leve en las encías o la nariz.
- Sangre en la orina
Si experimenta alguno de estos efectos secundarios, debe informar inmediatamente a su equipo médico.
Reconocer los síntomas de un accidente cerebrovascular
La mejor manera de maximizar sus posibilidades de recibir el tratamiento más eficaz para un accidente cerebrovascular es acudir a la sala de emergencias lo antes posible. Es posible que una persona que está sufriendo un accidente cerebrovascular no se dé cuenta de los síntomas. Puede aprender a reconocer un accidente cerebrovascular para poder obtener ayuda inmediata.
No espere a que desaparezcan los síntomas. Cuanto antes se trate un accidente cerebrovascular, menores serán los efectos a largo plazo.
Los síntomas de un accidente cerebrovascular incluyen:
- Dificultad para entender palabras o hablar.
- Entumecimiento del brazo, la cara o la pierna
- Visión borrosa o ennegrecida en uno o ambos ojos
- Visión doble
- Dolor de cabeza severo y repentino
- Vómitos
- Mareo
- Dificultad para caminar
- Pérdida de equilibrio o coordinación
- Debilidad de la cara, brazo o pierna.
- Cara o párpado caídos
- Confusión
Una palabra de Verywell
La prevención de accidentes cerebrovasculares es una parte vital de un estilo de vida saludable. Si bien los tratamientos son cada vez más eficaces para reducir las graves consecuencias de un accidente cerebrovascular, la prevención es la forma más eficaz de evitar las consecuencias del accidente cerebrovascular.
Las formas de controlar los factores de riesgo de un accidente cerebrovascular incluyen:
- Dejar de fumar
- Perder peso
- Incrementar la actividad física
- Reducir la ingesta de alcohol
- Eliminando el uso de drogas ilegales
- Reducir los niveles de colesterol y grasas.
- Manejo de la diabetes si la tiene
- Mantener una presión arterial saludable.
Si usted o un ser querido ha tenido un accidente cerebrovascular o ha recibido tPA para el tratamiento de un accidente cerebrovascular, espere una recuperación que puede llevar tiempo.