Un pequeño estudio portugués publicado en agosto de 2015 encontró vínculos entre la ingesta de proteínas y el umbral del dolor en mujeres con fibromialgia. También sugirió que la vitamina E puede tener un impacto en la calidad de vida. Además, los investigadores encontraron que los participantes con fibromialgia comían menos alimentos y alimentos de menor calidad que las mujeres sanas del grupo de control.
saulgranda / Getty ImagesDolor y proteína
Los investigadores dicen que el porcentaje de proteína en la dieta tuvo una relación positiva con el umbral de dolor, lo que significa que los sujetos que comieron más proteínas tuvieron umbrales de dolor más altos.
El umbral del dolor es el punto en el que la sensación se vuelve dolorosa y un umbral bajo se asocia con la fibromialgia. Es por eso que la presión leve o la temperatura moderada pueden molestarnos cuando no son un problema para otras personas.
(Umbral del dolorno debe confundirse contolerancia al dolor, que es la cantidad de dolor que puede soportar antes de quebrarse física y mentalmente).
Calidad de vida y vitamina E
Según los investigadores, las mujeres con fibromialgia que consumieron menos vitamina E obtuvieron puntuaciones más altas en el Cuestionario de impacto de la fibromialgia, que es una herramienta de medición de investigación estándar para evaluar la gravedad de la enfermedad. Una puntuación más alta indica que la afección tiene un impacto más significativo en su calidad de vida.
El resumen no aborda por qué podría ser esto. Sin embargo, otra investigación sugiere que la acción antioxidante de la vitamina E puede beneficiar a las personas con fibromialgia.
Menos comida, comida de menor calidad
El estudio también encontró que los participantes con fibromialgia comían menos calorías que los controles saludables, así como alimentos de menor calidad.
Una vez más, no se abordó el "por qué". Sin embargo, en mi propia experiencia, tener fibromialgia ciertamente puede hacer que busque comida rápida en lugar de cocinar comidas más saludables. La pérdida de ingresos relacionada con la enfermedad también puede ser un obstáculo para una mejor dieta.
Cuando se trata de comer menos en general, podría ser que un estilo de vida más sedentario requiera menos calorías o que los participantes simplemente estuvieran demasiado fatigados o con demasiado dolor como para alimentarse con regularidad. La economía también podría jugar un papel aquí.
¿Qué es la comida para llevar?
Entonces, ¿qué debemos sacar de este estudio? Es pequeño y necesita corroboración antes de que podamos decir con certeza que es exacto. Sin embargo, debido a que las proteínas y la vitamina E, en niveles apropiados, son buenas para usted, podría valer la pena aumentarlas (una a la vez) para ver si lo hacen sentir mejor.
Además, es un buen recordatorio de que es posible que no comamos tan bien como deberíamos. Es un desafío, sin duda, pero puede valer la pena hacer un esfuerzo para mantener alimentos más saludables en la casa.